Constanza Garrone integra, desde el 2015, la Selección Argentina de tenis de mesa adaptado. Junto a Elías Romero participaron del Open en Costa Rica, en el mes de diciembre y allí obtuvieron cuatro medallas. Romero (clase 5) fue medalla de plata de forma individual y bronce por equipos junto al representante de Holanda. Mientras que Garrone (clase 2) obtuvo la medalla de plata tanto invidual como por equipos, junto a la representante de Colombia.
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| Constanza Garrone y Elias Romero en Costa Rica |
Constanza Garrone es de Ituzaingó, representa al club ADIMA de Isidro Casanova. Compartió con Noti-Amateur Sports su balance de este 2019, lo que se viene para el 2020 y nos contó sus inicios en esta disciplina. Además de representar al país en distintos torneos, estudia Psicología en la Universidad de Morón.
-¿Cómo viviste el Open de Costa Rica?
-El Open fue excelente, superó ampliamente las expectativas con las que había ido. Fui a buscar algunos puntos como para poder afianzarme en el ranking para subir al puesto número 9 y así despegarme de la francesa que la tenía a una diferencia de dos puntos. Cuando empiezo a jugar veo que con la estadounidense no se me presentaron grandes problemas, lo pude resolver 3-0. Después quedaba jugar en la zona con la sueca, que es la número uno del ranking, y la venezolana. No estaba dentro de mis planes ganarle a la sueca, pero hasta que me llevé la sorpresa de ver cómo estaba jugando y que mi estilo de juego funcionaaba bien en el partido. Cuando gané los dos primeros sets, vi que era una realidad posible. Psicológicamente estaba muy fuerte, si bien tuve un set donde se me complicó, cuando lo gané no lo podía creer, no era algo que había aspirado cuando llegué a Costa Rica. Me sorprendió ganarle a la número 1 de una clase superior a la mía. En este torneo saqué alrededor de 52 puntos y a todas las que gané eran de clases más altas. No solo logré afianzarme en el noveno puesto, también achiqué una diferencia con la serbia que está octava.
-¿Cómo están dividivas las clases y sus categorías?
-El deporte se divide en categorías, según funcionalidad física. A mayor funcionalidad y movilidad, más alto es el número. Ella es una clase 3, a diferencia de la 2, tienen un manejo de brazos completos y con control de muñeca, eso hace que se le pueda dar otro efecto a la pelota, por ende se nos complica hacerle partido a clases más altas. Pero vi que mi estilo de juego calzaba muy bien y cuando lo gané no lo podia creer, pero tenía que bajar la euforia y adrenalida porque tenía otro partido ese día. Contra la venezolana puede afianzar mis golpes más fuertes. Después me tocó jugar con Inglaterrra y pude imponerme 3-0. En semifinal jugué contra la sueca nuevamente y me ganó 3-0, pero en un partido peleado. Fue un torneo súper emocionante,.
-El deporte se divide en categorías, según funcionalidad física. A mayor funcionalidad y movilidad, más alto es el número. Ella es una clase 3, a diferencia de la 2, tienen un manejo de brazos completos y con control de muñeca, eso hace que se le pueda dar otro efecto a la pelota, por ende se nos complica hacerle partido a clases más altas. Pero vi que mi estilo de juego calzaba muy bien y cuando lo gané no lo podia creer, pero tenía que bajar la euforia y adrenalida porque tenía otro partido ese día. Contra la venezolana puede afianzar mis golpes más fuertes. Después me tocó jugar con Inglaterrra y pude imponerme 3-0. En semifinal jugué contra la sueca nuevamente y me ganó 3-0, pero en un partido peleado. Fue un torneo súper emocionante,.
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| Constanza Garrone (izq) con la medalla de plata en el Open de Costa Rica |
-¿Cómo fue compartir en dobles con la jugadora de Colombia?
-En dobles decidimos que ella saliera primera paleta. Ganamos los tres dobles que había que ganar. Se nos complicó con Suecia-Inglaterra pero también fue muy ajustado. Quedamos muy contentas con la medalla de plata, si bien uno piensa en ganar y llegar lo más alto posible la realidad demuestra que a veces es difícil. Hasta que no dejé de jugar no me puse a ver los puntos que había logrado.
-¿Ya conocías a tu compañera de Colombia?
-Con ella no había jugado nunca, pero la había visto en otros torneos y en los Parapanemericanos de Lima. El jugar con ella fue una decisión que tomó mi entrenadora, ella decide con quién formo equipo y me puso contenta su decisión. Tengo una relación muy linda con toda la delegación de Colombia. Cuando empezamos a pelotear y ver cómo jugar nos dimos cuenta que congeniábamos muy bien y el nivel era parejo. Festejábamos los puntos con mucha alegría juntas.
-¿Qué balance hacés del 2019?
-El 2019 fue bastante vertiginoso, por todos los torneos que disputé. Tuve momentos muy buenos, pero la verdad que había empezado muy abajo el año. En Eslovenia no me fue muy bien, pero me sirvió para replantear la forma de juego lo que me dio muchísimo resultado en Lima 2019, la Copa Tango y Costa Rica. Todavía no tuve la oportunidad de cruzarme con clases de mi categoría para testear si mi estilo de juego planteado hasta el momento funciona bien con ellas. Fue un año de mucho aprendizaje, cambios, reacomodación, replantear el juego y de considerar más cercana la clasificación a Tokio 2020 después de estos resultados.
-¿Qué balance hacés del 2019?
-El 2019 fue bastante vertiginoso, por todos los torneos que disputé. Tuve momentos muy buenos, pero la verdad que había empezado muy abajo el año. En Eslovenia no me fue muy bien, pero me sirvió para replantear la forma de juego lo que me dio muchísimo resultado en Lima 2019, la Copa Tango y Costa Rica. Todavía no tuve la oportunidad de cruzarme con clases de mi categoría para testear si mi estilo de juego planteado hasta el momento funciona bien con ellas. Fue un año de mucho aprendizaje, cambios, reacomodación, replantear el juego y de considerar más cercana la clasificación a Tokio 2020 después de estos resultados.
-¿Qué objetivos tenés para el próximo año?
-El objetivo es clasificar a Tokio 2020 con todo lo que se pueda y lo mejor que se pueda. Las últimas chances para lograrlo las tengo en un torneo en España en marzo, para poder seguir escalando en el ranking y si todo marcha bien asegurarme el 8vo puesto. Sino después tengo un torneo en Italia que está pegado al de España, sino quedo en el ranking está el preolímpico en mayo que es la anteúltima chance de tener la clasificación directa a Tokio 2020 donde van todos los que no clasificaron por lo que es súper difícil. La última chance es la wild card que es una invitación de la Federación Internacional, es muy dificil, es como ganar un sorteo. Mi objetivo es tener una pretemporada bastante dura para poder prepararme lo mejor posible para el primer torneo que es el Abierto de España.
-¿Cómo fueron tus comienzos en el tenis de mesa?
-Yo siempre digo que el deporte me llegó a mí más que yo buscarlo. Tuve un accidente en el 2011, que me provocó una lesión medular a la altura de la sexta vértebra cervical. Cuando me pasó esto estuve un año internada en la clínica de rehabilitación, hasta que me empiezo a reintegrar a los estudios secundarios para poder terminarlos con mis compañeros. Ahí fue cuando mi psicóloga del colegio me comenta que tiene un conocido que hacía este deporte, que es Gabriel Copola, me pasó su contacto para ver que podía hacer porque a mí me gustaba el deporte. Entré a ver en las redes sociales todo lo que él hacia, todos los viajes con el deporte, y eso me fascinaba. Él me recomendó el Club Alena de Haedo. Quería ir para conocer gente, para hacerlo de forma recreativa, me sentía sola en lo que me pasaba y quería cruzarme con personas con las mismas características. Empecé a ir los sábados, tenía un grupo muy lindo y comencé de a poco a competir. Luego Luis Ferreyra me invitó a entrenar al Instituto Ramsay con vistas para lograr un mejor rendimiento para avanzar profesionalmente. A los seis meses me ve la directora técnica nacional con el objetivo de los Parapanamericanos de Toronto 2015 ese fue mi primer viaje internacional con la Selección Argentina. Todo se dio rápido, no fue algo proyectado ni planeado. Para mí es un orgullo representar al país. Es una responsabilidad muy grande que me la tomo muy en serio. Trato de dejar al país en lo más alto posible en los torneos internacionales.
-¿Cómo fueron tus comienzos en el tenis de mesa?
-Yo siempre digo que el deporte me llegó a mí más que yo buscarlo. Tuve un accidente en el 2011, que me provocó una lesión medular a la altura de la sexta vértebra cervical. Cuando me pasó esto estuve un año internada en la clínica de rehabilitación, hasta que me empiezo a reintegrar a los estudios secundarios para poder terminarlos con mis compañeros. Ahí fue cuando mi psicóloga del colegio me comenta que tiene un conocido que hacía este deporte, que es Gabriel Copola, me pasó su contacto para ver que podía hacer porque a mí me gustaba el deporte. Entré a ver en las redes sociales todo lo que él hacia, todos los viajes con el deporte, y eso me fascinaba. Él me recomendó el Club Alena de Haedo. Quería ir para conocer gente, para hacerlo de forma recreativa, me sentía sola en lo que me pasaba y quería cruzarme con personas con las mismas características. Empecé a ir los sábados, tenía un grupo muy lindo y comencé de a poco a competir. Luego Luis Ferreyra me invitó a entrenar al Instituto Ramsay con vistas para lograr un mejor rendimiento para avanzar profesionalmente. A los seis meses me ve la directora técnica nacional con el objetivo de los Parapanamericanos de Toronto 2015 ese fue mi primer viaje internacional con la Selección Argentina. Todo se dio rápido, no fue algo proyectado ni planeado. Para mí es un orgullo representar al país. Es una responsabilidad muy grande que me la tomo muy en serio. Trato de dejar al país en lo más alto posible en los torneos internacionales.
- Me gusta estar activa en otras cosas. Desde el año 2015 estoy haciendo la carrera de Licenciatura en Psicología, voy lento porque el entrenamiento me ocupa mucha energía y mucho tiempo físico. Además me gusta ir a seminarios, congresos. Doy charlas, no solo exhibiendo el tenis de mesa, sino también pudiendo hablar sobre la discapacidad y la mujer, desde una mirada feminista. He participado en trabajos de investigación sobre discapacidad dentro de la Facultad, con el Director de la carrera. Todas esas actividades complementan mi carrera deportiva, me nutren y me encantan. También me gusta salir a pasear con mis amigos, mi novio y mi familia.
